Muy lejos de los escándalos mediáticos y de condimentar las largas horas de los programas de espectáculos y sus chimentos, Andrea Bonelli se muestra en otra órbita. Por momentos parece conocer de sobra los códigos de la profesión que eligió abrazar, por otros, absoluto sapo de otro pozo. Segura, resoluta, firme, esta mujer sensual y de perfil bajo que canaliza su costado oscuro en las escenas de Los exitosos Pells, se prueba por primera vez, en su extensa carrera, en una nueva faceta artística. "Siento que éste es un verdadero cambio en mi trabajo. Es mi primera mala. No lo había hecho nunca. Estoy contenta de hacer algo nuevo, algo que no había hecho en televisión, en donde había hecho muchas cosas, pero nunca esto. Siempre algo nuevo es como renovador", dice Bonelli de la sexy e inescrupulosa Amanda, la villana de la tira que encabezan Carla Peterson y Mike Amigorena a las 21.45 de Telefé y, paradójicamente, uno de sus personajes más queridos.
"Encuentro muy buena repercusión en el público. Amanda provocó aceptación y tiene seguidores", recalca Andrea, quien a través de su malvada interpretación, curiosamente, se ha ganado la calle. "Yo no pensé que iba a pasar esto -se sorprende-, hasta tuve un poco de miedo porque ésta es mi primera mala y no sabía qué podía pasar. Generalmente, en la televisión una quiere ser querida o busca ser un poco heroína. De alguna manera querés generar la identificación de la gente. Yo me imaginé que me iban a odiar, pero por suerte fue todo lo contrario", se ríe de lo que, llamativamente, ha provocado "su" Amanda, la ambiciosa mano derecha de Franco Andrada (Hugo Arana), dueño del canal de noticias donde transcurre la mayor parte de la trama de 120 capítulos escritos por Esther Feldman y Alejandro Maci, los mismos autores de la consagrada LaLola.
ADORABLE MALICIA
El sex appeal que transmite en la tira que produce Sebastián Ortega, Endemol Argentina y Underground Contenidos supera a la querible Chichita de Los Roldán y mucho más aún a Mariana de Amo de Casa. Bonelli sobresale entre una adorable, y tantas veces insoportable, malicia dentro la historia de Los Pells. "Hacer a Amanda te desexorciza un poco", cuenta Andrea. "Tiene que ver con la diversión de hacer y experimentar cosas que uno en la vida no suele hacer. Sobre todo para mí es bueno hacer algo diferente", explica de Amanda, una mujer que se caracteriza por el estilo de ropa que usa y por la ostentación del poder que tiene.
En la ficción componés a una inescrupulosa capaz de lo que sea por obtener lo que desea. Fuera de ella, ¿qué tan alejada estás de esa postura? ¿Cuál es el límite para conseguir lo que te proponés?
"Soy muy distinta. Yo tengo muchos límites, tengo mucho prejuicio. No piso cabezas ni ostento ningún poder. Si quiero conseguir algo lo hago con buenas y nobles armas y si no, paso a otra cosa. Y además me considero una persona moral y de buenos sentimientos. No me puedo comparar en absoluto con una persona como Amanda. Ella lo único que tiene mío son algunas cosas muy exageradas que yo le pongo, pero hay muy pocos puntos de contacto conmigo. Ella es capaz de hacer cualquier cosa, creo que no tiene límites y eso es lo rico del personaje. Eso es lo que me atrae y lo que me gusta".
Amanda se desespera por el éxito y la competencia, ¿a vos te preocupa el buen rating de Valientes?
"La verdad es que me propuse no estar muy pendiente del rating. Uno aprende que no depende ni del equipo creativo ni de los actores, ni de lo bueno o malo que pueda ser un programa. El éxito depende de un montón de circunstancias. En este caso, creo que Los Pells es un buen programa y que, además, funciona. Valientes creo que también lo es. Pol-ka me parece una buena productora que ha hecho buenas ficciones. A mí me interesa que haya buenas historias. Eso contribuye a la buena televisión y yo lo apoyo incondicionalmente. El rating puede ser una consecuencia de ello o no. No me preocupa la competencia a ese nivel. Yo quiero trabajar en buenos programas, con buenos libros y muy bien hechos".
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